No creo en el arte, solo creo en la supervivencia. / I don´t believe in art, I just believe in survival.

domingo, 14 de marzo de 2010

Hámster doméstico

every night, when the colorful giant shut out the lights and noise, the training begins. this is hard. he hobbles to the wheel- spinning, spinning, spinning. every day, despite hunger, he hoards the food in his mouth. he will regurgitate later- perhaps he will need it. he hides in the plastic castle (is it haven or insult, this castle?) there, he deposits his supply for a more difficult, uncertain time. he must have some idea that he was the chosen one from that mountain of wool and blood. he sharpens his teeth on the toy cage. he must know. this would explain the restlessness, the revolutionary instinct. every day, his muscles are stronger. the simulated granary elicits gagging. ...he could open the cell with his incisors if he wanted. this is why he must have some idea. he must know. perhaps this is why he refuses to be discovered, why he hides his strength in mounds os cotton.
He will wait for instructions

(traducción: Érika L. Sánchez)

Fotografía: David R. Bomati

cada noche, cuando los gigantes de colores apagan las luces y los ruidos, comienza su entrenamiento. es duro. atropelladamente, se impulsa en la espiral de alambre. corre y gira y gira y gira. todos los días, dejando aparte la apetencia del hambre, almacena compulsivamente la comida en su boca. la regurgitará más tarde, quizás la necesite. se oculta en la casa de plástico sin saber si es un insulto o un refugio y deposita la carga para tiempos peores. debe seguro de tener algún sentido que fuera él el rescatado de la montaña de lana y de sangre. por eso espera mientras sigue este instinto revolucionario. afila sus dientes en la jaula de juguete. debe seguro de tener algún sentido. sus músculos son cada vez más potentes. el falso granero engule los vómitos y con sus incisivos sería capaz de abrir la cárcel. por esto debe de tener algún sentido. por eso oculta su fuerza entre algodones para no ser descubierto.

Llegarán instrucciones




(Gracias a mi amada Érika L. Sánchez por traducir mi hámster a su idioma. Hace el poema mucho más inquietante y nos hace estar mucho más cerca. Es un honor para mí contar con una poeta como tú. Te espero siempre. Gracias a David R. Bomati por buscar a mi hámster entre los objetos cotidianos. Es ahí donde vive. Es una suerte contar contigo por encima de los restos que dejan las tazas del desayuno. Gracias a mi hámster por recordarme que siempre hay que morder hasta el final. No pienso esperar instrucciones.)

2 comentarios:

Greta dijo...

no necesitas instrucciones.

Erika dijo...

!Gracias a ti! Nos veremos pronto para bailar y recitar poemas.