No lloró
adoptó la postura más cómoda
se sentó en el metro con su periódico gratuito y no vio la fecha
un parto de 9 a 9
de AM a PM
me miró a los ojos
cansado
después de un viaje en el que te mareas leyendo un libro
me miró a los ojos
sabía hablar,
pero decidió no utilizar ese código hecho de papel y de plástico
sin mediar palabra, pidió más bolsas en el supermercado a la cajera teñida de rojo,
parecía salir de una dura sesión de ejercicio
de un nuevo gimnasio en el que nadie sabe aún su nombre
las toallas limpias
y el agua
limpia
huelen ya a sudor de otros
realmente no lloró
y desde que lo vi
yo mismo desistí de que lo hiciera,
habría sido como tirar del pelo al portero de un inmueble.
En esta ocasión había decidio no subir escaleras
ni aprender un idioma
no era la primera vez que nacía
sino la última
sus padres sí lloraban
emocionados
como si hubieran parido a un presentador de la tele o a un guerrillero
no lloró
me miró a los ojos y yo decidí aceptar este puesto en el tanatorio
No hay comentarios:
Publicar un comentario